¿Qué estás comprando, cuando no compras en establecimientos especializados?
El otro día llegó a la correspondencia de nuestras tiendas la publicidad de una conocida superfície de bricolaje (Cuál? Eso da igual, hemos encontrado cosas similares a las que vamos a comentar a continuación en casi todas las publicidades que nos han llegado por parte de grandes superfícies de construcción que venden cerámica y materiales de reforma sin estar especializados en estos materiales) donde, entre todas las ofertas de materiales de construcción, herramientas y las promociones de materiales de jardín tan típicas de esta época del año, encontramos un detalle que escaparía a casi todo el mundo, pero no a un equipo de profesionales que llevamos 30 años trabajando en el mundo de la cerámica…
¡Un pavimento de 47x47cm!
No sabéis donde está lo extraño del caso, verdad? Dejad que os lo expliquemos. Apostaríamos fuerte a que la información que os vamos a dar no la conocen los que nos hicieron llegar esa publicidad.
Todo parte del proceso de elaboración de la cerámica. Como todos sabemos, la cerámica no es mucho más que barro horneado… Por lo tanto, las variables que encontramos según queramos conseguir una cerámica con unas u otras características son: la composición del material a hornear y la temperatura y tiempo de horneado.
En el caso de los pavimentos, las características técnicas que se les exigen son más estrictas. Deben tener una resistencia superior, y una absorción de agua menor, entre otros parámetros que permiten que el material cumpla con su función sin sufrir desperfectos. Estas características están estandarizadas y regladas por normas UNE e ISO, y las categorizaciones de los materiales no dejan lugar a dudas sobre las características de cada pieza.
Resumiendo esta primera parte: La industria azulejera tiene estandarizadas las características técnicas de sus productos, y también sus procesos de elaboración.
La gracia de todo este reside en el hecho de que los materiales con los que se elaboran las baldosas que no son porcelánicas son barros húmedos, que se secan durante el horneado. ¿Habéis visto nunca una pasa? Sabréis muy bien que tamaño tienen… de la misma forma que una uva se reduce al perder el agua hasta el tamaño de una pasa, las baldosas sufren la misma reducción dentro de los hornos… sin embargo, y dado que todo el proceso está estandarizado y las prensas del material son siempre las mismas, estas reducciones están calculadas y dan como resultado piezas con las mismas medidas.
Nosotros, como establecimiento con profesionales especializados en la cerámica, sabemos perfectamente cuál es el material y el procesado que da lugar a piezas de 47x47cm, así como las características finales de estas piezas, y os podemos asegurar que no cumplen con los requisitos mínimos para poder ser vendidas como pavimento. Son piezas muy porosas y con una resistencia a la rotura muy pobre.
Nosotros recibimos esta publicidad…
…Pero hay más ejemplos en otros lugares!
Estas piezas, que por sus características técnicas deberían venderse como revestimientos para pared (y aún así hablamos de piezas de una calidad baja para dicha aplicación… son piezas obsoletas que están en el límite de lo que es, hoy en día, éticamente vendible), se están vendiendo a precios muy bajos dentro de las grandes superfícies aprovechando el desconocimiento del público general, que cree haber encontrado una ganga cuando en realidad le están dando gato por liebre y a la larga, o no tan a la larga, tienen que acabar pagando el doble para sustituir un pavimento que no cumple con sus funciones más básicas.
Tristemente, el único argumento de venda de estos productos es su bajísimo precio, pero aún y así debemos ser conscientes de que no estamos comprando lo que necesitamos, y que por precios también muy económicos, hay hoy en día en el mercado una amplísima gama de pavimentos de calidad, de todos los acabados imaginables, tanto en nuestras tiendas como en otros establecimientos especializados en la cerámica. Incluso el porcelánico es posible encontrarlo hoy en día a precios muy accesibles, por lo tanto no es necesario ir a comprar baldosas a sitios donde corremos el riesgo de que nos engañen.
Si necesitáis cerámica, venid a vernos. En Cerygres nunca encontraréis a la venta bistecs de ternera… no los sabríamos ni cortar. De la misma forma, conviene no ir a comprarle baldosas al carnicero!